Abuso Físico
El abuso físico es cualquier lesión física no accidental (desde hematomas leves hasta fracturas graves o la muerte) derivada del hecho de dar un puñetazo, apalear, patear, morder, sacudir, lanzar, apuñalar, estrangular, golpear (con la mano, un palo, una correa u otro objeto), quemar o lastimar de algún otro modo a un menor, causados por el padre, la madre, un cuidador u otra persona responsable de dicho menor.
Dicha lesión se considera abuso, independientemente de si el cuidador tenía intención de lastimar al menor o no. La disciplina física, como las nalgadas o los azotes, no se considera abuso siempre y cuando sea moderada y no le cause ningún daño corporal al menor.
Señales y Comportamientos del Niño o Joven
- Presenta quemaduras, mordeduras, hematomas, huesos rotos u ojos morados sin explicación.
- Presenta hematomas descoloridos u otras marcas notables después de ausentarse por un tiempo de la escuela.
- Parece tenerles miedo a los padres y protesta o llora cuando llega el momento de volver a su casa.
- Señala que tiene una lesión causada por sus padres u otro cuidador adulto.
- Maltrata a animales o mascotas.
Señales y Comportamientos del Padre, Madre o Cuidador
- Da una explicación contradictoria o poco convincente de la lesión del menor, no da ninguna explicación o da una explicación que no es consecuente con la lesión.
- Dice que el menor es malvado o usa algún otro término muy negativo para referirse a él.
- Toma medidas de disciplina física muy bruscas con el menor.
- Tiene antecedentes de haber sido abusado en la infancia.
- Tiene antecedentes de haber maltratado animales o mascotas.